Voto en blanco – Esto es lo que no quieren que sepas 🤫🤯

 

El voto en blanco es un arma muy poderosa en manos de la ciudadanía, pero la mayoría no sospecha el detonante que tiene entre manos. Para comprender toda su fuerza, es necesario hablar de sus dos parientes cercanos: el voto nulo y la abstención.

¿Qué es el voto en blanco?

 

Votar en blanco consiste, sencillamente, en depositar en las urnas:

  • Un sobre vacío
  • Un sobre con una papeleta sin indicación de partido

Este tipo de voto tiene una interpretación muy clara que es:

He estudiado a todos los candidatos y no me parece bueno ninguno

El voto en blanco se ha configurado como un medio simbólico de expresar inconformidad con el escenario político. Se trata de una herramienta contra la partitocracia esgrimida por los descontentos con el sistema.

Más abajo veremos cuáles son sus límites y su potencial de cambio, y en qué medida es perjudicial para los partidos minoritarios.

El voto nulo

 

Un voto es considerado nulo cuando:

  • Se encuentra una papeleta rota, desgajada o destruida
  • Se encuentra un sobre con varias papeletas
  • El contenido del sobre no es una papeleta oficial

En cualquiera de los anteriores casos, lo que sucede es que el voto no es contabilizado y se considera nulo. Ya está. Como si no se hubiese votado.

La abstención activa

 

Existen la abstención y la abstención activa, aunque sean imposibles de distinguir en la práctica:

  • Se abstiene un votante que no ha acudido a las urnas por cualquier motivo
  • Se abstiene activamente un votante que no ha acudido a las urnas por considerar que es mejor

Las personas que se abstienen activamente suelen participar en manifestaciones, huelgas y, generalmente, se trata de activistas políticos.

Por otro lado, quien se abstiene puede sencillamente ser indiferente a la política, o haber estado enfermo el día de las elecciones, o que tuviera algún tipo de compromiso más urgente.

Ahora bien, la abstención es problemática como voto de castigo en tanto que no envía un mensaje nítido. Puede haber sido por negligencia, descuido o descontento, ¿quién sabe?

El voto en blanco sí expresa una clara disconformidad: se ha ido a votar y se han rechazado todas las opciones.

¿Qué pasa si gana el voto en blanco en España?

 

Imaginemos que el 80% del electorado emitiese un voto en blanco en las próximas elecciones y que votase el 20% de la población.

¿Qué ocurriría?

Que todos los escaños del parlamento serían ocupados por el 20% de los votos.

Lo que esto significa es que el poder del voto en blanco es actualmente anulado. 

Los votos en blanco podrían ser escaños vacíos y crear un silencio simbólico en pleno parlamento.

En lugar de eso, actualmente el voto en blanco no solo no perjudica a los partidos tradicionales, sino que perjudica a los partidos minoritarios, que quizás podrían cambiar las cosas.

Esto es así porque la asignación de escaños en España viene estipulada por la Ley D´Hondt. Según esta, hay un umbral mínimo del 3% de votos para obtener representación en las elecciones generales, y un 5% en las locales.

Esto lo vamos a comprender más abajo, lo que quiere decir es que el voto en blanco aumenta el número total de votos, y los partidos minoritarios tienen que conseguir más votos para alcanzar este umbral mínimo.

Resultado REAL de las últimas elecciones generales:

 

Resultado presentado en TV y prensa:

 

 

La suma de la abstención, el voto nulo y el voto en blanco se constituiría como la principal fuerza parlamentaria en España, pero el 100% de los escaños son repartidos sin dejar ninguno vacío.

Esto ocurre porque el voto en blanco no tiene representatividad según la ley vigente.

Para que esta situación cambiase tendría que reformarse la ley para que el voto en blanco fuese contabilizado y se materializa en escaños vacíos.

 

Existe en España un movimiento que busca legitimar el voto en blanco computable, de modo que sea tratado como una fuerza política y se le asigne representatividad.

Fundado en el año 2010, Escaños en Blanco busca ganar las elecciones con la promesa de dejar todos sus escaños vacíos y presionar para alcanzar una reforma de la ley electoral.

 

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Preguntas frecuentes sobre el voto en blanco

¿Qué validez tiene el voto en blanco?

El voto en blanco es contabilizado por los cómputos electorales pero no adquiere representatividad. A efectos prácticos, lo que consigue es aumentar el número total de votos emitidos. Al ocuparse el 100% de los escaños por los partidos que hayan sobrepasado el umbral de votos mínimos (el 3% en elecciones generales y 5% en las locales), lo que resulta del voto en blanco es que se favorezca a los partidos mayoritarios y dificulte la entrada en el escenario político de aquellas fuerzas políticas con menor cantidad de votos.

¿Para quién va el voto en blanco? ¿A quién beneficia?

El voto en blanco no va para ningún partido, pero favorece a los partidos mayoritarios. Esto está estipulado en el artículo 163 de la LOREG. También hay legislaciones específicas para ciertas Comunidades Autónomas, como Andalucía, Valencia o MadridLo que es clave comprender es que los votos en blanco suman al total de votos válidos emitidos, haciendo que la barrera mínima sea más difícil de alcanzar. Esto es así porque al votar en blanco el voto se suma al número de votos obtenidos por otras candidaturas.

voto en blanco dibujo de dos manos con papeletas y una urna en medio

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